6 de diciembre de 2008

Paternidad

Desde que compartí una mateada virtual que me hizo pensar acerca del ser padre infinidad de sensaciones e ideas han rondado mi cabeza. Más aún cuando intercambiamos opiniones con otro mateador que en cierto punto se ubicaba en las antípodas de mi forma de ver la paternidad y lo que eso significa.

Y entendí que es imposible transmitirle a alguien las sensaciones y los cambios que provoca la decisión de ser padre (o madre, para el caso es lo mismo, se generan diferentes estado y vivencias pero para el enfoque que quiero darle a estas palabras es semejante). Ya escribí sobre lo que sentí a partir de recibirme de padre, pero hay un momento previo, un click, que para cada ser humano es único y hace que la lente por la cual se mira el mundo cambie y ya nada sea igual.

Hay algo que cambia adentro. Y nada importa si desde siempre pensamos en que íbamos a formar una familia estando convencidos que cuando encontráramos con quien lo haríamos, o si un descuido o un que me importa hizo que las dos rayitas de un Evatest se formaran frente a nuestros ojos y dejamos de lado definitivamente la idea de interrumpirlo. Ese cambio se produce y chau. Podemos tener toda una vida previa sumida en la más ascéptica intelectualidad o ser una bestia que a duras penas dibuja la “o” con el culo de un vaso (cilíndrico, obvio), pero cuando decidimos ser padres, la evaluación de las cosas (que puedan involucrar a nuestros hijos) pasa del cerebro a las vísceras y no tiene vuelta atrás.

Tal vez hay un aspecto a tener en cuenta que a veces nuestra humana individualidad nos dificulta pensar, y tiene que ver con que un acto absolutamente egoísta (el que quiere traer un hijo al mundo es uno, no le pide permiso al susodicho que vendrá) que busca la satisfacción de un deseo propio genera que nunca más podamos pensar sólo en nosotros mismos sin importarnos el resto. Porque dentro del resto está esa persona que tiene una parte importante de nosotros en su ser, y les aseguro que si se siente la paternidad (maternidad) aunque más no sea un poco ya no podrá resultarnos indiferente.

Dejo un par de canciones que expresan mucho de lo que me generó y me sigue produciendo esta profesión de ser padre que he abrazado con toda devoción.





8 comentarios:

Eric dijo...

Una hermosa y muy profunda reflexión.
Yo no soy padre todavía, ni tengo planes de serlo por el momento, pero ojalá cuando lo sea pueda llegar a escribir algo como esto.
Un abrazo grande!

carmela dijo...

Me emocionan este tipo de cosas. Yo soy muy Susanita, asique deseo plenamente tener hijos (cuando llegue el momento oportuno que no es ahora) pero siempre me da miedo el "y mirá si no" y por otro lado, la vida rueda como se le da la gana y se encargará de hacer lo que tenga que hacer. A su vez este post, me hace pensar en mi papá, que es un padre excepcional y me siento afortunada de tenerlo.

che, me emocioné...¡gracias!

besos y felicitaciones por permitirte tanto.


pd. El tema "vos sabés" siempre, siempre me hace llorar.

Café (con tostadas) dijo...

Natxus, estoy emocionadísima de leer este post!

Por muchas cosas, desde el placer de que haya servido para algo la reflexión colectiva de ayer hasta la maravilla de verte otra vez escribiendo de ésto de ser padre.

Como te dije en mi blog, si un día encuentro a alguien que piense como vos, me quiera y a quien yo quiera, entonces encontré un padre! Y eso no habla de mí, eso es menudo piropo para vos ;)

m. dijo...

ultimamente las charlas sobre futuros hijos aparecen seguido en las charlas en mi grupo de amigos.

natxus dijo...

Eric: Me decía mi viejo "las ganas vienen como las de ir al baño"

carmela: Felicitaciones a tu viejo. Y vale lo que le dije a eric....

café: lograste sonrojarme. Y el que busca encuentra (cuando menos se lo espera)

m: mmmmmmm. por algo será....

Cani dijo...

Te felicito viejo !!

Abrazo

ani dijo...

Hola Natxus...yo también estuve en la mateada!!!
Mi hijo matteo es mucho para mi y llegó con dos líneas inesperadas.
Antes de él, yo quería ser corresponsal de guerra o irme al áfrica...y lo hacía. Mis planes se vieron modificados cuando emergió de mi cuerpo otro cuerpo y lo puse sobre mi pecho. A partir de ese segundo supe que ya me sería imposible vivir sin él.
Las dos canciones que posteaste las usé para un video casero para el día del Padre....lloramos todos de emoción! Seguiré pasando!

natxus dijo...

La bestialidad que contesté a eric y a carmela tiene que ver con lo sorpresiva e irrefrenable de la situación, digo.

Cani: Gracias

ani: Cancion de cuna la usamos para el video deentrada de mi hija mayor a su fiesta de 15. Todavía se me eriza la piel. Y sí, un hijo te vuela la cabeza.